LA ENTE (CAPÍTULO 2)

Sí era él. Me acerqué poco a poco para no asustar a la criatura que estaba en mi cocina. Pero esa criatura podía ser la ente. Bueno, sin pensarlo muy bien entré a la cocina y lo que vieron mis ojos era algo horripilante. Su descripción era algo raro ya que parecía una bola gigante, que estaba recubierta de una especie de moco viscoso.

La ente, de repente, se giró y se acercó a mí. Parecía que me estaba mirando con mucha curiosidad. Pero de repente sentí como si entrara en mi mente, trasportándome a un mundo nuevo lleno de sufrimiento y dolor. La ente empezó otra vez a transportarme a otro lugar aleatorio y esta vez era... Ni siquiera podía describir a dónde me había mandado. Pero esto duró poco, ya que paró de rebuscar en mi mente, creo.

Cuando desperté ya no estaba, pero sí me dejó algo que era una cruz hecha de mi propia sangre en el brazo derecho. Rápidamente me levanté del suelo y fui a llamar a mi mejor amiga. Pero no recordaba su número de teléfono entero. Creo que era 915942... Bueno, no recordaba su número de teléfono. En vez de llamar podría visitarla para contarle lo que me había pasado.

Me puse la chaqueta y cogí las llaves del coche, pero cuando salí todavía estaba... Continuará