Este libro va sobre un niño llamado Derek que se fue a un horrible campamento donde se ha visto obligado a convivir con la empollona de su clase; la obligación de leer libros que no soporta y hacer un resumen de cada uno de ellos.Una ciudad que, sin su mejor amigo, de vacaciones
en la playa, le parece un desierto... Aunque Derek no es un chico corriente. Se le ocurren las cosas más traviesas, como estrellar aguacates contra el coche de su padre, o ponerle espuma de afeitar en la boca a su perro.
Tiene muchas ganas de conocer lo que ha ocurrido. Le animarán a comenzar una investigación cuyos resultados serán agridulces. La verdad no siempre es agradable de conocer, pero pueden cambiar las cosas a mejor.
Al final, Derek cumple con la principal obligación de un preadolescente. El verano le servirá para pensar algunas ideas y para comprender un poco más el mundo adulto.
Y todo ello sin perder la sonrisa.
ESTE LIBRO ME HA GUSTADO MUCHO. LO PODÉIS ENCONTRAR EN LA BIBLIOTECA DEL COLEGIO. OS LO RECOMIENDO
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